“Necesitamos hablar para aprender a pensar”

“Necesitamos hablar para aprender a pensar”

Hablar parece un proceso sencillo y como parte del desarrollo humano, sin embargo si revisamos las palabras que usamos para expresarnos, tal vez encontraríamos que nuestro vocabulario es un numero limitado de palabras y expresiones que parecen repetirse una y otra vez, y eso revela nuestros significados e imaginarios que nos habitan, dicen los expertos que nosotros buscamos el significado a través de las palabras y que las palabras son formativas;si se refieren a que las palabras le dan forma a nuestras experiencias, sin duda, cuando escucho hablar a alguien, imagino, construyo, interpreto inevitablemente una realidad, hasta la siento, me identifico y todos los mecanismos psicológicos de nuestra predilección, sin embargo, ¿Qué pasa cuando me escucho hablar a mi misma?, ¿Me escucho?, ¿Me leo?

Tal vez al hablar me voy dando cuenta como el mago que saca de su boca una serie de pañuelos y parece sorprendido de los colores y la cantidad de ellos que salen, en su caso es parte del espectáculo, sin embargo el que habla, muchas veces no sabe qué va a salir de su boca, hasta que salen las palabras se revela la forma;las palabras dan forma a lo que estamos viviendo, experimentando, sintiendo, pensando, queriendo hacer, muchas veces escucho en consulta decir “ahorita que te estoy diciendo…me voy dando cuenta que…”, porque la palabra no solo expresa, nos hace pensar, nos hace descubrir quiénes somos, cómo somos, qué deseamos, qué aspiramos, etc.

Hablar y además escucharse es todo un arte, te hace auto revelarte no solo con el que escucha, principalmente contigo mismo(a), decimos comúnmente “nunca pensé que diría esto, pero…”, “sé que me voy a escuchar muy mal diciendo esto…”, sin embargo la palabra dimensiona todo un proceso interior que nos da forma a quienes somos.

La expresión de la palabra nos abre paso a vivir, abre caminos, aparecen puertas, ventanas, paisajes, personas que nos muestran el camino que vamos haciendo para poder vivir, continuar con nuestra vida, con nuestras relaciones, a veces deseamos dejar de hablar de asuntos, no queremos hablar con ciertas personas, pero eso no significa que dejemos de hablar y aprender de lo que no queremos hablar, a veces esas palabras prohibidas o que nos provocan rechazo las podemos trascender y nos lleva a nuevas formas de hablar, de vivir.

Casi siempre se cree que primero pensamos y luego vendrá la palabra, sin embargo puede el infante pensar en su madre para decir “Ma…má”, parece solo hacerlo y aparece entonces la madre sonriendo y abrazarlo, se crea una maravillosa asociación, el infante acaba de descubrir que decir “Mamá” es su nueva forma de acceder a lo que necesita, lo repite una y otra vez, parece sencillo, pero hablar es una forma de pedir, de estar, de mostrarse, de poner en movimiento el deseo de existir, de vivir.

Cati Preciado 27 de septiembre 2024.

imagen: Virgula de la palabra nahuatl (Mendoza)

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