Otro 8M para reflexionar
foto original de Chema Martinez Burgos©
Un nuevo día 8M, las mujeres parecemos ir ganando terreno en tener voz, lugares en los escaños del poder, la literatura, la ciencia, la academia, leyes que nos protegen, los colectivos que nos dan respaldo, podemos elegir que rol tomar desde nuestras diversas expresiones de nuestra femineidad, y aun así muchas sienten, sentimos que hacemos un esfuerzo doble o triple para hacer valer lo que sentimos, necesitamos, luego también hay que diferenciarse de las exigencias de lo que las mismas mujeres, amigas, hermanas, compañeras nosotras mismas pensamos y sentimos que deberíamos ser, hacer, pensar. Veo graciosos memes en donde retratan una mujer jaloneada por las autoexigencias de sí misma, de sus otras mujeres que la rodean diciendo “deberías de…”, “porque mejor no te dedicas a…”, “ya no seas…”, el sin fin de nosotras mismas con voces de descalificación, presión, envidias, agresión, comparación y violencia en sí.
Es casi imposible que alguna de nosotras no haya experimentado este tipo de situaciones , nuestro sistema social, familiar, laboral, de pareja nos encamina a hacerlo y nosotras(os) lo replicamos sin tener conciencia de ello. Hay arquetipos femeninos que nos representan a todas, nos gusten o no, algunos más que otros, están ahí, los vemos, los vivimos y necesitamos integrarlos para completarnos, algunos nos mueven a la transformación, nos hacen conscientes para salir de la inercia de esos roles que nos hunden unas a otras, me hundo yo misma en querer ser como no puedo ser, en querer sentirme como no me siento, en querer pertenecer donde no pertenezco.
El camino sigue para nosotras, no hemos llegado a la meta del empoderamiento femenino, porque el verdadero poder es la conciencia de la vulnerabilidad, sabiendo que no necesito imponerme, ni ser más fuerte que nadie, solo el valor de ser yo misma es un paso gigante que cada mujer podrá dar cuando esté lista, que sigan las voces escuchándose para poder seguir construyendo el camino para que podamos ir llegando, unas sobre los hombros de otras y otros que nos dan el espacio para aparecer, para estar, y que sigamos tomando el espacio que cada una necesita.
Que tengamos un día internacional de la mujer con todas las voces, de todas ellas, las vivas y las muertas, las que silenciaron y las que todavía no se atreven a hacerse escuchar.